Cuando el marido de Brenda Gough vio por primera vez a "Shrek" en la granja de la familia en Ontario, Canadá, pensó que se trataba de una alfombra vieja o un coyote muerto.
Tras una inspección más cercana, encontraron que el perro estaba vivo, pero totalmente petrificado y enmarañado, ni siquiera podía caminar.
De inmediato, Gough lo llevó a la Clínica Veterinaria Park Road, donde ella trabaja.
Los veterinarios que lo atendieron comenzaron a llamarlo "Shrek", por su repulsiva pero a la vez, adorable apariencia. Pasaron horas limpiándolo y cortando su pelo, así como otras atenciones médicas para su total recuperación. Reportan que retiraron 1.5 kilos de pelo animal enmarañado.
Aunque aún no se reconoce a sí mismo, "Shrek" ahora luce saludable y con una vida por delante. No es agresivo y de hecho, demuestra su interés en recibir y dar amor.
Luego de ser un perro abandonado y tener una existencia probablemente triste, ahora el perrito será feliz al lado de su nueva familia, con un nuevo look. A veces hay quienes sólo necesitan de una mano amiga, para recuperarse y salir adelante, si puedes, adopta un perro.